Erupción del volcán Calbuco – Séptimo día
Hoy arrancó con niebla que al disiparse pasado el mediodía nos dejó un espectacular día de otoño. Claro que con un poco de bruma de ceniza. No hubo casi viento y la pluma estuvo mucho más reducida, superando apenas el área del volcán.
De todas maneras durante la noche se depositó ceniza que estaba volando ayer. Mi auto amaneció con una interesante capa de grumos aglutinados de fina arena.
A la tarde, una vez que levantó la arena se desplegó un día soleado de otoño que si hubiera llovido a la noche ni cuenta nos habríamos dado de que hubo una erupción.
Y al igual que el viernes, pudimos tener una hermosa puesta de Sol:
Erupción del volcán Calbuco – Cuarto día
Hoy estuvo muy apacible, con una ligera brisa del Este. Al Oeste la bruma estaba más densa que ayer. La pluma cruzó por el Sur de Bariloche así que fue un alivio para los pueblos de Neuquén que pudieron dedicarse a la limpieza.
El atardecer de hoy fue un poco diferente al de ayer. Al haber más ceniza no fue esa explosión de dorados pero se podía ver el Sol con la ayuda de unos lentes oscuros.
Al ocultarse el Sol se pudo distinguir la pluma en sombra sobre el cielo todavía claro. Lo más interesante, para mi, es la manera de desplazarse en ondas separadas como hebras.
En cuanto a las noticias, hoy los políticos anunciaron alegremente que mañana Aerolíneas Argentinas reanuda los vuelos. Durante la erupción del Caulle, una pluma como la de hoy hacía impensable los vuelos. ¿Cambiaron los estándares de seguridad? Si es así, bienvenidos sean. Si no es así, seguro que fue un anuncio político que no le hará bien a los aviones que nos toca pagar a todos con nuestros impuestos.
Para terminar, aparte de sacar fotos también filmé la puesta de Sol y acá va acelerado diez veces:
Erupción del volcán Calbuco – Tercer día
Hoy el volcán empezó a emitir una nube moderada de ceniza y parece que la esperada tercer erupción no va a ocurrir. Según informaron del SERNAGEOMIN, la pluma actual está liberando la energía acumulada de manera gradual y por eso no habría otra explosión como las del 22 y 23. Por un lado mejor porque es preferible que se «desinfle» de a poco pero por el otro podemos estar así por meses.
La meganube de ayer cruzó el Alto Valle del Río Negro y siguió su viaje hacia el norte, cubriendo un amplio arco desde Mendoza hasta Buenos Aires, donde llegó hoy al mediodía. En Bariloche pasamos a tener un día «tranquilo» de pluma, con cielo celeste sobre nuestras cabezas pero sin llegar a ver nítidamente las montañas.
Y, como era de esperarse, el atardecer fue espectacular. Como ocurrió con el Chaitén y con el Caulle, las cenizas provocan unos efectos ópticos que multiplican la belleza usual de los atardeceres. Una buena recompensa tras tantas molestias.
En poco más detalle: