Erupción del volcán Puyehue – Día 54
Algunos estamos bastante molestos. Otros están muy molestos. Unos cuantos más están furiosos.
Debería sorprendernos que los anuncios hechos para paliar los efectos económicos de la erupción volcánica se quedaron en… bueno, anuncios. Se pidieron excenciones tributarias (Monotributo e Ingresos Brutos) para seis meses a partir de Junio, baja en los impuestos a los combustibles, baja o eliminación del IVA y algunos más que no recuerdo. En la práctica el combustible sigue igual, el IVA sigue igual, se siguen cobrando Monotributo e Ingresos Brutos de manera igual, lo mismo que las tasas municipales. Los que sí hicieron algo fueron Parques Nacionales que bajó el canon a los prestadores de turismo, los supermercados que armaron una canasta «barata», y la CEB que hace un notable descuento de 4,13 pesos por boleta.
Pero ojo, extendieron plazos para los vencimientos y se abrió una línea de créditos «blandos» para las PyME. ¡Además van a asfaltar la ruta 23! ¡Y empezarán en tiempo record! La verdad, una vergüenza. Pareciera que no se entendió que en Junio la actividad comercial fue prácticamente nulo. No se trabajó, no hubieron ingresos. ¿Cómo pretenden cobrar impuestos de algo que no ocurrió? Además no es que ahora esté funcionando todo perfecto o incluso mejor que antes, de manera que ahora se paguen los impuestos atrasados. ¡Al contrario! Hay solo un cuarto de turistas de un invierno normal. Y no es el cuarto que más plata gasta, por lo que, en la calle, hay un flujo de dinero que es mínimo.
Las imágenes muestran a turistas contentos diciendo «está todo normal». Pero esto es para que vengan más turistas, no para que los funcionarios digan «ya se arregló, no necesitan nada más». Cuando cayó la nieve y llegaron los primeros (pocos) turistas se habló de «alivio». Pero «alivio» es estar deshidratado en medio de un desierto y tomar un vasito de agua. Te sentís mejor, pero estás complicado igual.
La publicitada solidaridad empresaria se ve a cuentagotas. Mientras la CEB hace un descuento en sus gastos, la ERSA le vende la electricidad a la CEB al precio normal. Algunos locatarios que alquilan para comercios bajaron los precios para no asfixiar las cuentas de los que están vendiendo poco. Otros locatarios siguen cobrando lo mismo, poco les importa si el comercio no sobreviva a fin de mes. Lo mismo para alquileres de vivienda. Los trabajadores temporarios que están empleados al mínimo, tienen que pagar los alquileres como si ésta fuera un invierno récord. Y lo mismo el gas, el agua y la nafta. Dificilmente puedan ahorrar para los meses de baja temporada que, a diferencia de lo que piensan muchos ilusos, no va a remontar milagrosamente.
Los funcionarios, otra vez, prometieron y desaparecieron. Total en Diciembre vendrán otros a calmar el volcán.