Erupción del volcán Puyehue – Día 48
Hoy, en el diario Río Negro:
Derrumbe de las ventas en la zona afectada
Seguimos sincerando la situación, aunque a cuentagotas. Porque si bien se salió a celebrar la llegada de turistas y eso dio la impresión de que todo está bien, la realidad está aun muy lejos. Uno de mis hermanos, transportista, está haciendo un cuarto del promedio de viajes para Julio. Y estima que esto durará unas dos semanas más y después caerá. El otro de mis hermanos me contó que varios de sus amigos ya se han ido de Bariloche o están prontos a irse.
Creo yo, escuchando comentarios del tipo «en Septiembre esto repunta», que hay mucha gente que cree que el turista que no vino en Junio-Julio vendrá después. Bromeando hice la analogía que tal vez piensen que los turistas se acopian en silos para usarlos después, cuando mejoren las condiciones. Pero lamentablemente esto no es así. Las vacaciones en Brasil, por lo general, son del 15 de Junio al 15 de Julio. Coincide en Julio con las vacaciones de invierno de Buenos Aires y por eso la llamamos «Temporada Alta». En Agosto y Septiembre no hay vacaciones ni en Brasil ni en ninguna otra parte. Resultado, la gente que no vino ahora NO VA A VENIR hasta el año que viene.
Perdón por ser malaonda, pero es la realidad. Creer en un Septiembre Salvador solo va a lograr que nos confiemos y, peor aun, que el Estado no de las exenciones y rebajas impositivas que se pidieron. De hecho, ya lo están haciendo con Monotributo e Ingresos Brutos que se están cobrando normalmente o, en algunos casos, extendiendo los vencimientos. Pero es un mero placebo, porque durante Junio no se trabajó y ese trabajo directamente se perdió, no se recupera más. ¿Cómo pretenden cobrar impuestos por algo que nunca existió? Los anuncios políticos se están quedando en anuncios y los únicos cambios que se ven son los tomados por los privados con descuentos en hotelería y supermercados. El Estado, en cualquiera de sus formas, no ha hecho nada de fondo que realmente impacte en el bolsillo de la gente.